Una maestra de primaria en Corea confesó haber asesinado a una estudiante aleatoriamente y su justificación fue que "estaba irritada" por la exclusión laboral

Un caso impactante ha surgido en Daejeon, Corea del Sur, donde una maestra de primaria de 40 años, identificada como "A", ha confesado haber asesinado a una estudiante de primer grado de 8 años, Kim Ha Neul, por frustración después de haber sido excluida de las tareas de enseñanza.

Según la estación de policía de Daejeon Seobu el 11 de febrero, "A" dijo a los investigadores: "Me irrité solo tres días después de regresar al trabajo. ○○ me impidió enseñar".

"A" había estado recibiendo tratamiento para la depresión desde 2018. El 9 de diciembre del año pasado, se tomó una licencia médica de seis meses, pero intentó regresar después de solo unos 20 días, alegando que había recibido una evaluación "normal" de un médico. Sin embargo, su regreso repentino no la llevó a reintegrarse de inmediato a la docencia, lo que al parecer desencadenó su ira.

El 10 de febrero, "A" compró un cuchillo fuera de la escuela antes de entrar en las instalaciones. Luego atacó a una estudiante al azar que esperaba fuera de la sala audiovisual para que los niños terminaran su clase de cuidado extraescolar. "A" testificó que no tenía una víctima específica en mente y eligió a la última estudiante que salió de la sala, atrayéndo a la pequeña Kim Ha Neul hacia adentro diciéndole: "Tengo un libro para ti". Luego estranguló a la niña antes de apuñalarla.

El 10 de febrero, alrededor de las 6 p.m., las autoridades descubrieron a Kim Ha Neul herida de muerte en el segundo piso del edificio de la escuela, junto con "A", que había intentado hacerse daño. Los informes indican que "A" había mostrado previamente un comportamiento violento hacia sus colegas.

"A" se está recuperando actualmente en una unidad de cuidados intensivos después de una cirugía. La policía planea investigar sus motivos más a fondo una vez que su condición se estabilice.

El funeral de Kim Ha Neul se celebró el 11 de febrero en Daejeon, mientras la comunidad lamenta la devastadora pérdida.